De sobra es conocido por todos, que el estado mental en el que juguemos al golf, los pensamientos que tengamos durante una ronda o el propio carácter de cada uno afecta en el rendimiento. Por eso os invito a jugar con cabeza: “el golf de los golpes buenos”.
¿Cuántas veces hemos escuchado en un campo de golf frases como “voy a jugar a asegurar” o “no voy a arriesgar en este golpe”? Desde mi punto de vista son pensamientos o frases que en nada ayudan psicológicamente a un jugador de golf, aportando más sensaciones negativas carentes de confianza que sensaciones positivas y motivadoras. Perjudicando a tu golf en todos los niveles.
¿Qué es el golf de los golpes buenos?
Resumiéndolo mucho, cosa que no debería hacer para que sigáis leyendo, es hacer lo que sabes. Cuando tengas que decidir qué golpe vas a efectuar te decantes por el golpe en el que tienes un alto porcentaje de éxito, golpes que ya has entrenado en la zona de prácticas y que en cierto modo están dominados.
Creo que esto se entiende mejor con un ejemplo:
Imagina que tienes la bandera a 200 metros y 20 metros antes del green termina un lago que mide 50 metros de largo, en esta situación tienes dos opciones: tirar a pasar el lago o tirar corto.
Con la madera 3 cuando la pegas “perfecta” haces 190 metros de vuelo (solo 10 metros pasado el lago) y con el hierro 8 haces 120 metros. La pregunta es ¿cuántas veces la pegas “perfecta” con la madera 3? ¿El 20% de las ocasiones? Pues en ese caso no es golpe que deberías elegir, elige la opción de golpear antes del lago con el hierro 8. ¿Podrías pasar el lago? Sí, dos de cada diez veces… en las otras ocho ocasiones tendrás que dropar la bola en el lugar que la hubieras dejado con el hierro 8.
Llegados a este momento es cuando no tienes que relajarte, tienes que golpear el hierro 8 comprometido al 100%, tienes que dar un buen golpe. No pienses en si el golpe es fácil o difícil, es un golpe que se merece toda tu atención.
Otros ejemplos comunes serían: intentar frenar la bola en dos metros en un approach con el green cuesta abajo y el viento a favor; pegarla entre los arboles por debajo del primer árbol y por encima del segundo… como si fueras Seve vaya…
Al ejecutar golpes que sabes hacer, la percepción que tendrás de tu juego será mejor, tu confianza aumentará y consecuentemente tu rendimiento.
Así que la próxima vez que vayas a jugar y tengas que tomar una decisión, qué es en cada golpe, no pienses en términos de arriesgar o asegurar, valora las opciones y decántate por dar un golpe bueno.